
Cuando gestionamos un equipo debemos entender que es imprescindible delegar para obtener mejores resultados y también para afianzar nuestro rol de líderes.
Normalmente nos cuesta delegar, en primer lugar, porque creemos que necesitaremos más tiempo para explicar que para hacer, y segundo, y más importante, porque esto significa salir de nuestra área de confort, nos excusamos en las cargas de trabajo de cada día (en las que probablemente nos sentimos más cómodos) para evitar entrar en tareas más difíciles o menos tangibles, pero que son imprescindibles en nuestro trabajo, tales como definir estrategias o simplemente crear.
Si delegas, tu equipo será más productivo y avanzará en su desarrollo, y tú, serás también más productivo y tendrás ese espacio mental necesario para ser creativo y estar continuamente en movimiento o evolución.
Importante: no debemos confundir el delegar con quitarse el trabajo pesado de encima, porque si lo que hacemos es esto, vamos a tener los resultados contrarios a los que podríamos tener delegando correctamente. Seremos cuestionados, el trabajo se amontonará e involucionaremos.
Entonces, ¿cómo podemos delegar efectivamente?
- Da instrucciones completas: explica exactamente qué necesitas, para qué y para cuando. Explica claramente como se lleva a cabo la tarea que has encomendado. Confirma que se ha entendido.
- No pretendas la perfección: ya sabemos que tú lo harías perfecto, pero entiende que también se puede hacer de otras maneras igualmente buenas, y sobretodo, necesitas que el trabajo se haga, no hace falta que sea una obra de arte. La próxima vez, seguro que estará mejor. Debemos dejar tiempo para el aprendizaje.
- Para de pensar que eres el único que puede hacer el trabajo: nadie es imprescindible, y dicen que para ser un buen líder, debes tener el propósito de llegar a ser innecesario para tu equipo; actúa con este principio. Si dejas libertad y autonomía para decidir como se hacen las cosas, el ambiente en el equipo también mejorará.
- Haz seguimiento: no dejes sola a tu gente, acompaña en el desarrollo y infunde seguridad en su trabajo. Fija un plan de revisiones, dará tranquilidad a la ejecución del trabajo.
- Da las gracias: asegúrate que tu equipo se siente reconocido y que se aprecia su trabajo.
Comentarios